Centroamérica y República Dominicana enfrentan retos importantes para el desarrollo productivo de las zonas rurales, entre ellos la dependencia de la demanda externa y la volatibilidad de los precios, así como la exposición a tormentas, huracanes, sequías y otros desastres naturales que se ven agravados por el cambio climático. Para ayudar a la toma de decisiones vinculadas al desarrollo rural y agropecuario y a la seguridad alimentaria, la Comisión Económica para América y el Caribe (CEPAL) puso en marcha un proyecto sobre Gestión de Información para Políticas Públicas (GIPP) que contó con el apoyo de diversas instituciones. Mediante esta iniciativa se conformó una base de datos con cerca de 900 variables e indicadores sobre estas materias. Entre ellos figuran los volúmenes de producción y los precios internacionales de los productos agropecuarios, así como los porcentajes de la población que se encuentra tanto en condición de pobreza e indigencia como en situación de desnutrición.